Mi rutina diaria de auto cuidado

Mi rutina matutina es una parte importante en mi vida, no sólo porque me hace sentir bien físicamente, también emocionalmente. Además me da la seguridad, estructura y soporte que necesito esos días que estoy en bajón, ya sea por la enfermedad o anímicamente.

He desarrollado esta rutina durante años y va cambiando con el tiempo, cuando estoy en mi punto más bajo necesito más mimos así que añado algunas otras prácticas. Pero eso sí, no fue magia, no fue que un día desperté y empecé hacer todo, fue un hábito a la vez.

Me tomó tiempo descubrir qué funciona mejor para mí en mi vida, qué ayuda mejor a mi cuerpo y a no sentir ansiedad o stress, sino tranquilidad y felicidad, qué me ayuda a mantener una actitud positiva y cultivar una mentalidad de crecimiento.

Lo que funciona mejor para mí puede ser diferente a lo que funciona mejor para ti

Esto es lo primero, entender que esta es mi rutina, y te la comparto no para que la copies sino simplemente para mostrarte lo que hago, para darte ideas y, con suerte, inspirarte a crear tu propia rutina matutina única que te ayude a vivir con alegría cada día sin importar qué tan bien o mal se sienta tu cuerpo.

La rutina que crees para ti va a depender de muchas variables, de dónde te encuentras en tu propio camino o viaje de autocuidado, si trabajas a tiempo completo, si eres madre, si tienes alguna enfermedad, qué síntomas tienes, etc, etc.

Es posible que tengas muy poco tiempo por la mañana y puede ser más importante para tu bienestar dormir lo más que puedas por la mañana y, en cambio, desarrollar tu rutina al mediodía o por la noche.

O puedes romper con lo acostumbrado y hacer tu rutina a lo largo del día si el tiempo te lo permite. Por ejemplo, caminar afuera durante la hora del almuerzo, meditar mientras tu bebé duerme la siesta, escribir en tu diario de gratitud antes de acostarte, etc. No tienes que hacer todos tus hábitos de bienestar a primera hora de la mañana.

Desarrollando mi rutina matutina

Esta rutina que te voy a compartir es la adaptación de mi rutina a esta época de covid, con las restricciones de mi país, pues mi rutina pre-covid era un poco diferente. La tuve que adaptar, pues fueron meses para mi en los que me sentía débil, asustada, frustrada, preocupada y angustiada.

Me sentía abrumada con los cambios generados por el covid en mi vida, en mi salud y mi trabajo, así que adopté un enfoque de bienestar “1% mejor”. Es decir, buscar desarrollar suficientes hábitos saludables que me ayuden a sentirme un poco mejor, entonces tal vez combinados, me sentiría mucho mejor!

Ten en cuenta que ahora trabajo en casa, soy independiente y puedo crear mi propio horario. Puedo trabajar más un día y menos otro día o mas en las noches y menos en la mañana. Así, que nuevamente te repito, dependiendo de cómo te sientas y cuáles son tus responsabilidades, es posible que debas priorizar los hábitos y no hacerlos todos, y ser creativa con tu día.

Mientras experimentas con tu rutina matutina, te animo a ofrecerte mucho amor y apoyo.

Si tienes el objetivo de despertarte a una hora determinada para comenzar tu rutina, pero te hace sentir mal física y necesitas dormir más, está bien. Repito, está bien. El objetivo de una rutina no es causarte ansiedad o stress o algun malestar fisico, no seas un sargento contigo misma!

El objetivo de la rutina, es ayudarte amorosamente a sentirte lo mejor que puedas! Y a veces, eso puede incluir comenzar tu rutina matutina más tarde de lo habitual para que puedas dormir el tiempo que necesitas. Se amable contigo misma y haz todos los ajustes necesarios.

Progreso, no perfección

Buscar la perfección, te puede hacer sentir frustrada, habrá días en los que no podrás cumplir tu rutina o con la lista completa de tus interminables tareas diarias. Enfócate en cómo se siente tu cuerpo con los hábitos de autocuidado en lugar de enfocarte en tachar elementos en tu lista.

Mi rutina matutina

Esta es mi rutina matutina diaria. Recuerda que soy un ser humano y no soy perfecta y que mi rutina varía día tras día.

Junto a cada uno de mis hábitos de rutina matutina, incluí un rango de tiempo estimado que dedico a cada hábito. Pero, cada día dedico una cantidad de tiempo diferente a cada uno, dependiendo de cómo me siento, lo que necesito y mi horario del día.

• Enjuague con aceite (entre 15 a 20 minutos)

Esta es una práctica de la medicina ayurveda, que se trata de enjuagar tu boca o hacer buches con aceite. La medicina ayurveda recomienda diferentes aceites, pero yo uso el aceite de coco, pues me es muy fácil de conseguir y comprar en presentaciones grandes. Cuando empecé hacerlo no me gustó mucho, así que a mi pote de aceite de coco le agregaba aceites de grado terapéutico de menta o canela, y ya me quedé con esa práctica, así que suelo agregar siempre diferentes tipos de aceites, como de cúrcuma, neem, clavo de olor, etc.

Es difícil a la primera hacer buches por tanto tiempo, empieza de a pocos unos 5 o 10 minutos y luego vas aumentando.

Luego de hacer el enjuague ya me cepillo los dientes con pasta dental, lo más natural y libre de químicos que pueda conseguir.

• Beber 2 vasos de agua

El agua no solo elimina las toxinas del cuerpo, también apoya el proceso de curación y mejora la comunicación celular entre otras funciones importantes. Siempre me preguntan cuán tibia deber ser el agua, debes ir probando, cuando al tomar el agua sientas una respuesta en tu estómago, esa es la temperatura que tu cuerpo necesita.

• Diario de gratitud (aproximadamente 3 minutos)

Simplemente enumero 5 cosas por las que estoy agradecido y me tomo un momento para SENTIR la gratitud. Puede ser cualquier cosa, superficial o profunda. Grande o pequeña. Simplemente pienso en lo que estoy agradecida en ese momento, sin juzgarlo.

• Meditación (entre 10 a 20 minutos)

Aunque no sólo es meditación, algunas veces utilizo meditaciones guiadas, a veces respiro de manera consciente (sintiendo cómo se infla mi vientre) y otras practico respiraciones o  pranayamas.

Solo recuerda que meditar requiere práctica, puede haber cosas que nos distraigan, pero se trata de soltar lo que nos distrae y volver a la práctica. No seas tan autoexigente contigo, solo practica.

• Practica espiritual y oración (45 minutos)

Dedicar tiempo a una práctica espiritual por la mañana me ayuda a conectarme, superar el miedo, encontrar la paz y recordar lo que es realmente importante para mí. Cualquiera que sea tu sistema de creencias, te animo a cultivar una práctica espiritual en la mañana para comenzar tu día de una manera pacífica.

Yo opto por escuchar la misa del dí y escuchar canciones y alabanzas alegres para moverme un poco.

• Jugo verde (10 minutos)

He descubierto que la mejor manera para romper mi ayuno es tomar jugo verde, y lo hago sea invierno o verano. No me estreso mucho respecto a esto, pues meto en mi licuadora todas las verduras que encuentro en casa, sobre todo hojas verdes, según el día a veces agrego germinados, algas en polvo, maca, etc.

Hay personas que preparan sus jugo o batidos en el extractor, yo no lo hago de esta manera, porque demora mas, además a veces el residuo que queda, que es la fibra la voy almacenando y no llego a utilizarla, asi que tomando el jugo licuado me tomo toda la fibra.

• Correr o caminar (preferiblemente en la naturaleza, entre 10 minutos y una hora)

Hacer que mi cuerpo se mueva es vital para mi, es por eso que no me importa ponerme mi ropa de ejercicio aunque sólo salga unos 10 minutos.

Me encanta correr, me gusta sentir esa sensación de libertad, pero no siempre puedo correr, así que cuando no puedo salgo a caminar.

Ya sea que camine o corra, siento que aumenta mi energía y mejora mi ánimo.

Antes solía ponerme metas de distancia o calorías a quemas, ahora prefiero escuchar mi cuerpo y utilizar todo el tiempo que tenga disponible. Lo que sí busco son lugares con vegetación, pero que esa no sea una excusa para no salir a moverte.

• Yoga (entre 15 minutos y una hora)

Regularmente después de caminar o correr y aprovechando que encuentro algún lugar que me guste en el parque, hago algunas repeticiones del saludo al sol. Otras veces regreso corriendo a casa y utilizo el yoga o algunas posiciones para estirar y enfriar. Y otras veces, cambio el caminar por una sesión de yoga completo y salgo a caminar en la tarde o en la noche.

Mi práctica de yoga también varía de mis ánimos, de mis día y de mi cuerpo, así que estoy entre hatha yoga vs ashtang yoga. Mientras el hatha implica un ritmo pausado, el ashtanga se basa en posturas y movimientos fluidos, ligados a la respiración. Hay diferentes tipos de yoga, te animo a que practiques algunas y descubras cuál es el yoga correcto para ti.

• Desayuno

Cambio lo que como en el desayuno dependiendo de cómo me siento y la época del año.

Lo más importante para mí es que incluya proteínas, grasas saludables y carbohidratos en forma de vegetales. De esta manera me aseguro de tener la suficiente energía para mi día.

Recuerda que esta son ideas, incluye en tu vida el hábito que sientas que te puede ayudar y que mejorará tu vida. Empieza con uno y luego ve añadiendo otros. Y sobre todo, recuerda que somos humanas, no somos perfectas, a veces nos caemos, a veces tenemos ganas de cambiar y también no podemos cansar de todo.

Tu cuerpo te irá dando la «retroalimentación» que necesitas para saber si el hábitos o los hábitos de tu rutina son los correctos, puedes cambiar tu rutina cuantas veces quieras y las veces que lo necesites.

Tener esta rutina no me resultó fácil. Se sintió TAN difícil. Cambiar es difícil. Desarrollar hábitos saludables es algo difícil. Sin embargo, vivir con los síntomas de alguna enfermedad o condición autoinmune es más difícil. Mi rutina matutina me ayuda a sentirme mejor. Después de años creando esta rutina, te puedo decir que lo que parece difícil hoy será más fácil con el tiempo.

Después de leer mi rutina, tal vez pienses que estoy loca por hacer lo que hago, o tal vez sea muy poco para ti, y tal vez tengas razón, esto es lo que me funciona a mi, respecta y descubre lo que funciona para ti.

Te estoy enviando mucho amor y apoyo! Cree en ti !

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